Las fracturas de escafoides pediátricas se presentan al tratamiento de manera tardía del 8% al 29% de las veces. Las indicaciones para la inmovilización con yeso en esta población no están claras. La definición de retraso en el tratamiento clínicamente importante se basa únicamente en informes anecdóticos. El tratamiento exitoso con yeso puede ser más deseable que la intervención quirúrgica. Sin embargo, aún no está claro qué factores clínicos y radiográficos pueden predecir el éxito del yeso.
Conclusiones: La presentación tardía de las fracturas de escafoides 21 días o más después de la lesión predice un mayor riesgo de falla del yeso; sin embargo, la tasa de unión sigue siendo alta con un tiempo comparable en el reparto. La inmovilización con yeso para las fracturas de escafoides que se presentan 21 días o más después de la lesión es una opción razonable.
Dr. Eduardo Hernández Mendez-Villamil / Cirugía de la Mano y Microcirugía / Ortopedia y Traumatología. Hospital Ángeles México / Agrarismo # 208 consultorio 555 Torre B Col. Escandon, Alcaldía Miguel Hidalgo C.P. 11800 Ciudad de México. Teléfonos: 43360868 y 43360869
La implicación clínica de una deformidad en flexión residual después de la cirugía por pseudoartrosis del escafoides no está clara. Sesenta y tres pacientes que se sometieron a cirugía de pseudoartrosis del escafoides fueron evaluados después de una media de 7 años (rango 5-10) para analizar los resultados en función de la presencia de deformidad residual del escafoides.
El resultado primario fue la puntuación de discapacidades del brazo, el hombro y la mano. Los resultados secundarios fueron la puntuación de la evaluación de la muñeca calificada por el paciente, el rango de movimiento y la fuerza de la muñeca. Los pacientes fueron dicotomizados a deformidad residual o sin deformidad. La deformidad del escafoides se calculó a partir de tomografías computarizadas en función de la diferencia media entre la relación altura-longitud del escafoides operado versus el escafoides no lesionado.
No hubo diferencias entre la deformidad residual (n = 33) y la ausencia de deformidad (n = 30) en ninguna de las variables de resultado, excepto en la extensión de la muñeca, que fue ligeramente peor en el grupo con deformidad. El grupo de deformidad tuvo un mayor número de osteoartritis radiográficas, pero todos los casos fueron leves y la osteoartritis no se correlacionó con un peor resultado.
Concluimos que la deformidad residual del escafoides no tiene un impacto negativo relevante en la función de la muñeca a mediano plazo.
Aunque existe evidencia de que un solo tornillo de compresión sin cabeza es suficiente para la fijación de la mayoría de las fracturas de escafoides, se ha demostrado que la osteosíntesis de doble tornillo produce mayor resistencia al fallo y rigidez que un solo tornillo. Sin embargo, no se ha determinado el efecto biomecánico de diferentes configuraciones de tornillos.
No existen diferencias biomecánicas significativas entre los tornillos de compresión sin cabeza dobles alineados coronal o sagital en un modelo de fractura de escafoides con pérdida ósea.
En los casos en los que se considere la fijación del escafoides con tornillos dobles, la colocación de tornillos dobles puede quedar a discreción del cirujano y puede estar determinada por la facilidad de acceso, la preferencia quirúrgica y la orientación de la fractura.
Surke C, Huntington LS, Zhang X, Ek ETH, Ackland D, Tham SK. Double-Screw Osteosynthesis in an Unstable Scaphoid Fracture Model: A Biomechanical Comparison of Two Screw Configurations. J Hand Surg Am. 2022 Nov;47(11):1118.e1-1118.e8. doi: 10.1016/j.jhsa.2021.08.019. Epub 2021 Oct 22. PMID: 34690014.
Dr. Eduardo Hernández Mendez-Villamil / Cirugía de la Mano y Microcirugía / Ortopedia y Traumatología. Hospital Ángeles México / Agrarismo # 208 consultorio 555 Torre B Col. Escandon, Alcaldía Miguel Hidalgo C.P. 11800 Ciudad de México. Teléfonos: 43360868 y 43360869